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Gurpilen txokoa / el rincón de Gurpil

Cómo han cambiado las cosas...

Cómo han cambiado las cosas...

Antes para poder hablar en público, en la TV, en la radio,  o en cualquier lado, se requería unos estudios, unos conocimientos, una formación, una cultura, un saber estar.

Ahora, cualquiera se puede forrar en la TV sin tener ni idea de nada, mientras otros, tienen que abandonar la TV porque lo que dicen es demasiado culto, formado o interesante, y eso vende muy poco parece ser.

Los blogs es otro ejemplo, cualquier patán desinformado puede hablar sobre asuntos que desconoce, que ignora, y dar su opinión aún estado totalmente desinformado o equivocado.

Estamos viviendo un cambio en la cultura, en la información, en los hábitos de consumo, en la publicidad y en las relaciones sociales.

La manera de consumir información y  el marketing ya no es unidireccional, ahora triunfa la interacción con la gente, la bidireccionalidad,  la participación activa.

Twitter, Facebook, Tuenti, Xing, y un sinfín de redes sociales que nos relacionan con empresas, amigos, y desconocidos.

Todo tiene su lado bueno, y su lado malo, como en todo, y no lo comentaré ahora, porque esto daría para un debate muy largo, interesante, pero muy largo. Lo dejaré para otro día.

Analizando todas estas cosas me hago varias preguntas:                                      

¿Es bueno que cualquiera pueda hablar?

¿Es bueno que cualquiera pueda opinar sobre asuntos que desconoce?

¿Es bueno dar todas las herramientas de comunicación a todo el mundo?

¿Está todo el mundo preparado?

Como ejemplo pongo la opera, desde que se intenta hacer popular, desde que se intenta que vaya todo el mundo, lo único que se ha conseguido es que cada vez suenen más móviles en mitad de acto, que la gente lleve el bocadillo como si fuera a San Mames, y que la gente vaya peor vestida a un acontecimiento así.

Otro ejemplo sería como la gente sin ningún tipo de pudor se atreve a decir públicamente como entrenar un equipo de fútbol, como resolver la crisis, como acabar con el paro, como dirigir la empresa...

Qué clasista suena todo esto, ¿verdad?, lo sé, pero lo mismo que la opera tal vez no es para todo el mundo, o que no todo el mundo está capacitado para  tener un arma, igual no todo el mundo está capacitado para que le dejen todos los canales y medios de comunicación abiertos a un solo click de su índice.

Como bloguero y facebookero, me incluyo el primero en este artículo.

¿Es bueno que pueda hablar todo el mundo de cualquier cosa?

¿Qué opináis?

 

 

8 comentarios

avatar -

De acuerdo con vos,y Xabier,pero lo de tele5 no, es preciso que exista para ver la diferencia..bueno yo no veo esa cadena,pero es el contrapunto...lo peó!
La radio,es lo mismo..al final eliges la que te identifica..
Desde luego,que cada día alucino más,con los encumbrados por la fama e ignorancia...ag

gurpil -

Xabi, tienes razón en todo lo que dices, y además, me ha gustado mucho los ejemplos que has puesto.
Tanto el de selección natural, como el de los txikiteros e internet.
Hay espacios como los blogs, que como tú dices, no hay que censurarlos, ley natural, pero...
¿y la TV?,
¿y la rádio?,
¿y la prensa?
Recordemos que Iñaki Gabilondo deja los informativos por poca audiencia, y supongo que inquietudes personales, mientras Belen Esteban triunfa en todos los sitios.
La gente es tertuliano y comentarista sin saber hacer la "o" con un canuto.
Hombre, supongo que yo también estoy más cerca de Belen Esteban que de Eduard Punset, pero por lo menos no vivo de mi ignorancia ni presumo de ella.
Ahora me pongo en plan manifa y pongo en la pancarta:

QUÉ CIERREN TELE 5 YA

Xabier -

Jode Gurpil cuantas preguntas...
Sin darle tantas vueltas al tema yo haria una comparacion entre internet y el tipico bar de txikiteros.
En internet la mayoria de la gente habla de un monton de cosas, a veces sin entender muy bien de que estan hablando pero criticandolo o dando la razon. Pues en un bar de txikiteros pasa exactamente lo mismo, generalmente la gente habla tambien de un monton de cosas sin entender muy bien lo que dicen pero defendiendolo.
La diferencia esta en que en un bar solo se enteran los que han puesto el oido en el que habla y en internet eso se maximiza.
En cuanto a lo de que si cualquiera puede hablar de cualquier cosa, me parece que esta bien en dejarlo como esta, no creo que se pueda meter una censura, ademas pienso que en los blogs como en el mundo real hay una seleccion natural. El que escribe tonterias seguro que no tiene visitas ni comentarios y al final se cansara del blog y lo terminara dejando.
Que curioso que yo tambien estoy hablando de un tema que no controlo y parece lo hago...

WU -

Vaya tema, Gurpil. Iba a responder, pero tal y como planteas el asunto, mejor responder algo bien pensado, así que en ello estoy.

gurpil -

Te doy la razón, Markel, todo el mundo tiene dentro un super algo.
Eso se suele ver también en las reuniones de escalera, en el típico encargadillo de taller....
He insisto, yo el primero.

Markel -

Sí, claro, pero ¿cómo nos portamos cuando nos toca o tenemos la ocasión? Por mi curro, me hincho a contestar alegaciones de la gente (me refiero a cualquier ciudadano; en lo mío TODO el mundo tiene derecho a opinar) y ha habido veces en que he flipado en colores. Salvo honrosas excepciones, me ha dado la impresión de que la mayoría de la gente tiene un alcalde, un abogado, un arquitecto o un ingeniero dentro, ¡todo junto! Pero lo más gracioso es cómo algunos intentan disfrazar el interés particular de interés general... A lo que iba: derecho a opinar, sí, por supuesto. ¿Todas las opiniones valen lo mismo? No. Si yo no sé nada de astronáutica, podré opinar si me parece bien (a mí, no a la humanidad) mandar un hombre a Marte, no sobre si hacerlo en una sonda o en bicicleta. Y quien sepa, tendrá el derecho y la obligación de corregirme. Guardando siempre las formas, eso sí, aunque el ignorante casi nunca lo haga.

Anónimo -

Ahora lo que triunfa es "el pin pan toma lacasitos", el Jonan de Baraka, y Belen Esteban.
España endiosa a iconos de la ignorancia y la cutrez.

gurpil -

Otro día hablaremos de las redes sociales, de internet, y de como está cambiando todo a velocidad terminal.
¿Estaremos preparados?