Blogia
Gurpilen txokoa / el rincón de Gurpil

montaña y esquí

Alex Huber en solo integral.

He tenido el placer de verle escalar, y hace varios años le vi en una impresionante proyección en Bilbao.

Una carrera deportiva espectacular,  especialista en escaladas de grandes paredes, escaladas de dificultad y sin cuerda.

 ¿Qué os parece el vídeo?...

¿Qué tal van las fiestas?...

Freeride.

Un vídeo de esquí de fuera pista con una clara alusión al calentamiento global y a las energías renovables.

De lo mejorcito que he visto últimamente en vídeos de esquí.

¿Como van las fotos que estáis sacando del maretón que tenemos?...

Si queréis enviarme alguna, la pondré gustosamente en el blog.

Que viene, que viene...

Parece mentira que esté diciendo que viene, que viene en alusión a la nieve, cuando estamos a más de veinte grados, con sol, viento sur, calorcito y a mediados de noviembre.

Como una amiga mía me llama últimamente monotemático en alusión a que solo hablo de surf, le dedico este artículo sobre mi verdadera pasión, la montaña, el esquí de montaña.

Soy igual de paquete que en el agua, pero me lo paso bien y disfruto, que es lo  importante.

Este año además, toca cambio de esquís, jur,jur,jur.

Vídeo dedicado a la snowboarder de Matiena y a nuestro grupo de esquí-facebook.

Pirineos en primavera.

Pirineos en primavera.

Sol, esquí de montaña, soledad, silencio, sudor, sensaciones, cada día me gusta más la primavera.

Fotografías de este pasado viernes, entre Astún y Formigal, por la zona del Midi d´Ossau.

Fotografías: albertogurpil, sacadas con el móvil.

Cursillo de esquí on-line.

 Primavera, ¡qué gran estación!

Época de grandes descensos de esquí.

Viendo estas imágenes, me acuerdo cuando descendí esquiando el Mont Blanc, en Chamonix, hace ya unos 17 años.

Ahora estoy más viejo, más gordo, en peor estado de forma, pero esquío mejor, aunque soy más miedoso.

Me encantaría volver cualquier invierno de estos, primero necesitaría entrenar mucho, ya que el ascenso es largo y duro en invierno,  y disfrutar de uno de los mejores descensos que puede hacer un esquiador de travesía.

Cualquier parecido entre lo que se realiza en este vídeo, y lo que hago yo, es una ilusión óptica, no existe parecido.

 

¡Ya es primavera!

¡Ya es primavera!

Recibiendo la primavera como se merece.

Relax, a casi 2300 metros de altura, escuchando SMILE, comiendo una tortillita de patata, bebiendo una cervecita, y esperando tranquilamente a que el sol ponga la cara norte del San Lorenzo un poco más blanda para bajar esquiando.

Gran descenso.

Gran día.

Te lo mereces primavera.

Fotografías de: albertogurpil, sacadas con el móvil.

 

Esperando...

Este fin de semana ya se podía ir viendo algo de nieve por Gorbea, y claro, la cabeza empezaba a pensar ya en blanco.

El material de travesia preparado, los cantos afilados, los piolets pidiendo guerra, y el material de pista deseando ya bajar,bajar, y bajar.

 

Cómo podéis ver, los vídeos no son grandiosos, pero bastante difícil es engañar a alguien para que te grabe, y  más difícil es,  hacerlo tú bien.

Ha quedado como se ha podido, soy de la generación de las diapositivas, y tengo muy poco material de montaña en formato vídeo o digital.

Habrá que crear un buen archivo este año...

 

Las llamaban salidas nocturnas.

Las llamaban salidas nocturnas.

Con unos doce años ya íbamos los amigos solos al monte, por aquel entonces yo iba mucho al monte los fines de semana con mi aitita,  también estaba apuntado a los boy scoutt que me llevaban a montes diferentes en lugares que no conocía y acompañado de amigos.

Me acuerdo de una salida en particular, los monitores la llamaban salida nocturna, y como su nombre indica, se subía al monte de noche, para después dormir en su cima, contando historias de brujas y de seres terroríficos que purulaban en la noche.

Años después, con unos 18 propuse a mis amigos de Durango ir al monte por la noche, se rieron, me tomaron por un loco, pero accedieron a probarlo.

Durante varios veranos quedábamos a las 10.30 de la noche para tomar un café, y desde Goienkale, zona de bares de Durango,  subíamos por atxarte hasta el Pol-pol, para después ascender a la cima de Anboto o del monte que tocara esa noche bajo la luz de la luna, si la había, o inmersos en la más profunda oscuridad.

Durante las noches de  luna llena la luz que irradia nuestro satélite es tan fuerte, que no hace falta frontal o linterna alguna, es más, la sombra que proyecta es tan grande y clara que llega a molestar al andar.

Durante esos felices años de vacaciones de tres meses subimos de noche a todos los montes de la zona,  vivaqueábamos en la cima, nos echábamos muchas risas, y dormíamos como podíamos, ya que cuantos más eramos, menos hueco teníamos en las cimas.

Recuerdo una noche en la cima de Mugarra una estrella fugaz que vimos, era como una bola de fuego que pasó muy cerca nuestro, nunca supímos muy bien que fue aquello. 

Yo de vez en cuando sigo con esta tradición, y el día pasado, aprovechando la luna llena, di un bonito paseo por el monte, disfrutando del romanticismo de la luna, del misterio de las estrellas, del miedo de la solitaria noche con sus sombras cambiantes, y de la paz de la montaña sin gente.

De noche todo es muy diferente, ya sea en la soledad de la motaña o mar, o en el tumulto de la discoteca, en la cual todos los gatos son pardos.

Fotografías de: albertogurpil.